El autocuidado, esa palabra que está tan de moda y que a veces nos da quebraderos de cabeza ya que no lo hacemos como deberíamos, pero realmente…
¿Qué es el autocuidado?
El autocuidado, en sí mismo, es el tiempo que nos dedicamos por y para nosotrxs mismxs, así de simple. Pero la cosa se complica cuando nos empeñamos en hacer universal todo aquello que atiende a diferencias individuales.
Y esque aunque suene redundante, cuando hablamos de autocuidado solemos hacer referencia a “pensar en nosotros mismos” desde el cuidado y el cariño, con el fin de atender y satisfacer nuestras necesidades:
Físicas:
- Ejercicio físico.
- Alimentación.
- Higiene del sueño.
- Higiene personal.
- Etc.
Emocionales:
- Validación emocional.
- Ventilación emocional.
- Conocer y poner limites.
- Etc.
Cognitivas:
- Fomentar el funcionamiento cognitivo (memoria, atención, etc).
- Descanso cognitivo.
- Estrategias de afrontamiento.
- Etc.
Sociales:
- Interacción social (amigxs, familiares, etc.)
- Pasar tiempo a solas
- Etc.
Desarrollo personal:
- Gestión del tiempo.
- Proyectos futuros.
- Ocio.
- Etc.
A pesar de que podamos hacer esta distinción de categorías, no significa que sean las únicas que existen, y mucho menos que sean universales para todo el mundo.
El autocuidado es algo muy personal, dependerá de cada persona y por tanto pueden existir más áreas, pueden tener X nombre, etc. lo importante será identificar cuál es nuestra necesidad, y del cómo queremos atenderla y satisfacerla.
¿Por qué es tan importante?
La respuesta es sencilla… porque:
Por una parte, sin esos cuidados afrontar nuestro día a día se hace más cuesta arriba ya que estaremos en un “low batery” constante. Ej: qué pasaría si no pusiésemos a cargar nuestro móvil, y lo usásemos para escuchar música, contestar mensajes, ver instagram o usar el GPS para ver la ruta más rápida… pues que poco a poco, y a lo largo del día, iría bajando la batería, hasta que esta se agotase. O qué pasaría, si aunque lo usásemos, solo pusiésemos a cargar un ratín… y que estuviese oscilando entre el 1% y el 10%. En ambos casos, nuestro móvil hace RIP, por eso solemos ponerlo a cargar, verdad? pues a nosotros nos pasa lo mismo.
Y por otra… sin esos cuidados empezamos a:
- Sentirnos menos a gusto con nosotros mismos.
- Percibirnos menos válidos, menos resolutivos, más saturados etc.
- Exigirnos más.
- Usar un lenguaje más peyorativo con notros mismos
Y este cóctel, hace que nuestra autoestima y nuestro autoconcepto vayan bajando poco a poco.
Por tanto, esas frases maravillosas que a veces nos decimos como: “el tiempo para ti/ el no hacer nada, es una pérdida de tiempo” estan muy lejos de la realidad, ya que el dedicarnos tiempo, mimo y descanso es fundamental para nuestro funcionamiento como personitas.
¿Cómo seria un autocuidado de 10?
Pues… no existe una receta mágica ni estándar para todxs, no todxs tenemos las mismas necesidades ni la misma forma de atenderlas.
A veces, cuando intentamos aplicar estándares universales es cuando el autocuidado se nos hace bola, ya que lejos de ser “cuidado y mimo para mi” se convierte en “lo que tengo/debo hacer” y por tanto en una fuente de malestar más.
Entonces… cómo se si lo estoy haciendo “bien”
Sencillo, cuando tu objetivo principal es el “cuidado y mimo para ti”, o dicho otra manera, lo haces* “por y para ti” teniendo en cuenta tus gustos, tus preferencias, tus recursos, tus limitaciones, etc.
*Engloba el hacer una actividad o el no hacer