¿Qué es la comunicación pasivo-agresiva?
Es un estilo comunicativo que se caracteriza por la expresión del malestar o el desacuerdo de manera indirecta con el fin de evocar emociones desagradables (Ej: culpa) en los demás para así poder conseguir lo que se quiere o se desea.
Ej: en una discusión no expresar qué es lo que nos ha molestado pero mostrar que hay algo que ha generado malestar. “No tengo que decirte lo que quiero o necesito, tendrías que darte cuenta”
Por lo que, en vez de transmitirlo de una manera abierta y clara, se genera una desconexión y ambivalencia entre lo que se dice y lo que se hace, especialmente cuando se utiliza la resistencia pasiva*.
Ej: aceptar una tarea que no queremos o con la que no estamos de acuerdo, y expresar el malestar indirectamente, no cumpliendo con lo acordado o con los plazos.
*Resistencia pasiva: se acepta una petición desde la amabilidad y el agrado, pero después se expresa el malestar, saboteando dicha petición.
¿Por qué lo utilizamos?
Porque al principio funciona muy bien ya que:
- La confusión, que se genera a raíz de la incongruencia entre el lenguaje verbal y no verbal hace que nos podamos atribuir la responsabilidad total de lo ocurrido y por tanto nos sintamos culpables y nos planteemos que “nos teníamos que haber dado cuenta” de que ese “algo” pudo causar malestar, aunque no nos lo hubieran dicho.
- La culpa es una emoción que nos empuja a arreglar lo sucedido, pues no nos gusta ver que nuestros seres queridos se pueden sentir incomprendidos o a disgusto con algo que hayamos podido, decir o hacer.
Por tanto, como somos seres empáticos y no nos gusta hacer sentir mal ni sentirnos mal, terminamos haciendo lo que la otra persona quiere y así “todo se soluciona”.
¿Qué desventajas puede tener?
A pesar de que es un estilo comunicativo que funciona, que sea nuestra principal forma de comunicarnos tiene varios hándicaps:
- Deteriora las relaciones y genera rechazo, ya que:
- No se expresan las cosas de manera abierta y honesta.
- Suele ir acompañado de una actitud áspera, descortés e insensible.
- Puede generar quejas frecuentes sobre sentirse subestimado o engañado.
- Genera desequilibrio en la relación.
- Se basa en el chantaje emocional y la manipulación, porque:
- Se velan las verdaderas intenciones.
- No se asume la responsabilidad del malestar propio ni del causado. Ej: “lo intente con todas mis fuerzas, pero no pudo ser” “¿qué te pasa? nada, tú sabrás” ”cuándo te pones así no hay quien te entienda”.
- Se minimizan o invalidan las emociones/sentimientos, logros y opiniones de la otra persona. Ej: “eso no es lo que quise decir” “estas interpretando mal mi comentario” “si muy bien, pero podrías hacerlo mejor.
- Se intentan imponer los criterios propios de manera sutil y camuflada Ej: “da igual, siempre tengo que hacerlo yo” ir a baile no te está haciendo bien, yo te lo noto… tu quizás ahora no lo ves pero confía en mi que yo si lo veo”.
- No se defienden los derechos, propios ni del otrx (coerción). Ej: “no pasa nada, hacemos eso que te apetece a ti” “lo que dices no tiene sentido, deberías aclararte las ideas” “tratas a todos bien excepto a mi”.
- No resuelve conflictos ya que:
- El mensaje no llega de manera directa y por tanto no se puede crear un plan de acción efectivo.
- No ayuda en la comunicación, ya que al no expresar el malestar, este se va guardando y acumulando, hasta que “explota”.
- Se subrayan los errores, defectos, etc. de la otra persona.
- No favorece la negociación.
- Fomenta la imprevisibilidad y la ausencia absoluta de control, lo que genera un ambiente hostil y poco seguro.
- Resentimiento a las hacia las peticiones de otros:
- Genera resistencia a la cooperación y/o procrastinación a la hora de atenderlas.
¿Qué puedo hacer si no sé decir las cosas de otra forma?
El cómo nos comunicamos es algo que se puede modificar y que se va entrenando en el día, ya que no somos ordenadores y no vale solo con actualizar el software. Por tanto, algo un buen punto de partida puede ser:
- Identificar las situaciones en las que aparece este estilo.
- Cuando quieras expresar algo, prueba a:
- Hacerlo desde el yo. Ej: “yo pienso…”
- Decirlo de forma clara. Ej: “me ha resultado incómodo…”
- Pregunta por la opinión de la otra persona. Ej: “tu qué opinas”
- Cuándo recibes feedback, prueba a:
- Válida las emociones y/o la visión de la otra persona. Ej: “visto así, entiendo que…” “es normal que… ”
- Prueba a proponer alguna alternativa. Ej: “te parece si para la próxima vez…”
- Preguntar si tienes dudas. Ej: “a que te refieres con…”
- Práctica en tu día a día.
Recuerda…
Somos personas y a veces es difícil aplicar las cosas cuando nos encontramos en situaciones de tensión, la clave está en ser conscientes de qué hacemos, qué queremos hacer y practicar =)